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1 queso camembert de 250 g
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100 g de lacón troceado
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1 lámina de hojaldre refrigerado
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1 huevo
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2 patatas
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1/2 puerro
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Unas hojitas de tomillo
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Aceite
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Sal
- Pimienta blanca

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Lavamos las patatas y las cocemos 20 min en agua con sal; las pelamos y cortamos en rodajas. Cortamos el queso por la mitad en horizontal. Limpiamos el puerro, lo lavamos y picamos; lo sofreímos en una sartén con 2 cucharadas de aceite; salpimentamos y reservamos. Precalentamos el horno a 180º.
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Extendemos el hojaldre y ponemos en el centro 1 disco de queso con la piel abajo. Hacemos unos cortes en la masa, desde el queso al borde, a modo de radios. Cubrimos el queso con el puerro, la mitad de las patatas, el lacón y el resto de patata, tapamos con la otra mitad del queso. Cerramos el hojaldre, levantando los triángulos de masa, acaballándolos ligeramente para cubrir el relleno por completo.
- Pintamos el hojaldre con el huevo batido y horneamos el pastel unos 25-30 min, hasta que la masa suba y se dore. Lo servimos bien caliente con unas hojitas de tomillo.

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Las masas ahorran tiempo. Recurre a las refrigeradas mejor que a las congeladas que se manejan peor. No las manipules mucho porque pierden el frío y suben menos. Puedes ahorrarte el pincelar con huevo porque se doran bien.
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Comprueba que no tienen mucha sal o grasa y que esta sea aceite de oliva o girasol o bien mantequilla, y evita las de aceite de palma o grasas combinadas.
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La corteza del queso no se quita, pues protege el hojaldre de la humedad de los otros ingredientes y así queda más crujiente.
- La masa sobrante se puede cortar en tiras y enrollar a modo de rosas para decorar el pastel. Las pincelamos con huevo batido y las horneamos a la vez.
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